viernes, 12 de agosto de 2016

los 'dueños' de los juegos (segundos 60 años)

Segunda entrega de los personajes que por sus hechos y proezas se apropiaron de las Olimpiadas en las que participaron.  
 
XVII. ROMA 1960: Primeros Juegos transmitidos en directo por televisión. Fueron los últimos en que intervino Sudáfrica que por el Apartheid sería vetada de las competencias deportivas internacionales hasta 1992. La gran estrella fue el etíope  Abebe Bikila, un ex miembro de la Guardia Imperial de Haile Selassie, quien ganó la Maratón corriendo descalzo, estableciendo récord mundial y convirtiéndose en el primer campeón olímpico de África negra. Volvería a ganar la Maratón en Tokio, esta vez con zapatillas, pero no repetiría la hazaña en México pues la altura del Distrito Federal le hizo abandonar a media carrera. En 1969 un accidente automovilístico lo dejaría parapléjico. Moriría en 1973 a los 41 años. En honor a su memoria, el Estadio Nacional de Adis Abeba lleva su nombre.
XVIII. TOKIO 1964: Primeras Olimpiadas transmitidas a color en Japón y Estados Unidos. El personaje fue la nadadora australiana Dawn Fraser, ganadora de la medalla de oro en las dos ediciones anteriores. Siete meses antes del inicio de los Juegos sufrió un grave accidente automovilístico en el que murió su madre y ella quedó herida. Obligada a usar collarín, siguió entrenando hasta que pudo recuperarse totalmente. Ganó su tercer campeonato olímpico consecutivo al superar por una brazada a la estadounidense Sharon Shoulder. A pocas horas de la ceremonia de cierre, Fraser se fue de juerga con unos amigos y en la madrugada la policía los arrestó, en aparente estado de embriaguez, al intentar robar la bandera japonesa del mismísimo Palacio Imperial. Enterado de su ‘travesura’, el Emperador Hirohito le obsequió la susodicha bandera; gesto benévolo que no tuvo la Federación Australiana. Por lo bochornoso del incidente la suspendió por diez años, lo que significó el fin de su carrera en las piscinas. 
XIX. MÉXICO 1968: Justa que se vio empañada por la invasión a Checoslovaquia por los tanques soviéticos y la masacre de cientos de estudiantes en Tlatelolco, diez días antes de iniciarse el evento. La figura destacada fue el atleta afroamericano Bob Beamon —compañero de los atletas que recibieron sus medallas con el puño en alto, enfundado en un guante negro, símbolo del Black Power— quien estableció uno de los récords más famosos y longevos de la historia: 8.90 en salto largo, el cual fue batido 23 años después por Mike Powell en un Mundial en Tokio con 8.95 (marca que continúa hasta la fecha). La marca de Beamon todavía no ha sido superada en torneos olímpicos. 
XX. MÚNICH 1972: Juegos ensombrecidos por el terrorismo. Un comando palestino denominado ‘Septiembre Negro’ ingresó en la Villa Olímpica, asesinó a dos deportistas israelíes y secuestró a otros nueve. En el intento de rescate, murieron los nueve secuestrados y cinco de los ocho secuestradores. El hecho pasó a la historia como ‘La masacre de Múnich’. La figura fue el nadador estadounidense Mark Spitz, quien consiguió siete preseas de oro en un solo torneo (récord superado por Phelps en 2008). A pesar del éxito alcanzado y con tan sólo 22 años, se retiró del deporte para dedicarse al negocio de los Bienes Raíces.    

XXI. MONTREAL 1976: Las Olimpiadas más costosas de la historia. La construcción de buena parte de las instalaciones —incluyendo el estadio— se financió con un impuesto a la venta de cigarrillos en la provincia de Quebec. Este impuesto especial se siguió cobrando hasta diciembre de 2006, cuando las deudas se saldaron por completo. La leyenda fue una chiquilla menuda de 14 años, llamada Nadia Comăneci. La rumana derrotó al equipo soviético —las favoritas— consiguiendo por primera vez en la historia la marca perfecta, 10.0, en Barras Paralelas y dos oros más en Individual y Barra de Equilibrio.  
XXII. MOSCÚ 1980: Un año antes del inicio de estos Juegos, la Unión Soviética invade Afganistán. Esta agresión provoca que Estados Unidos desista en participar, boicot al que se suman 64 países más (China entre ellos, que nunca tuvo buenas relaciones con sus vecinos del norte). La figura más destacada fue el gimnasta soviético Alexsandr Dityatin, quien obtuvo ocho medallas en total (récord igualado por Phelps en Beijing).
XXIII. LOS ÁNGELES 1984: Debido al boicot a los juegos de Moscú, la Unión Soviética devuelve la ‘gentileza’ y decide no participar en la cita de California, al igual que varios de sus aliados de la órbita comunista, a excepción de Rumania (doliéndome cómo la gringa Mary Lou Retton le ‘robó’ el primer puesto en gimnasia individual a mi favorita Ekaterina Szabo). La estrella fue el atleta estadounidense Carl Lewis quien igualó el récord de Jesse Owens en Berlín '36 al lograr cuatro preseas doradas en cuatro pruebas distintas.
XXIV. SEÚL 1988: Corea del Norte no participa en los Juegos y a esa decisión se les une Nicaragua, Etiopía y Cuba (perjudicando a Javier Sotomayor, líder mundial indiscutible en el Salto Alto). La prueba anti-doping del atleta canadiense Ben Johnson es quizá uno de los más grandes escándalos olímpicos de la historia. En la prueba de 100 m estableció un récord fabuloso: 9.79 s. Lamentablemente, los exámenes comprobaron que había corrido bajo los efectos de los esteroides y fue descalificado. Le dieron la medalla a Carl Lewis quien ocupó el segundo puesto. Muchas veces Johnson intentó resarcirse en diversas competiciones, pero jamás pudo despojarse la fama de ‘corrupto’.

XXV. BARCELONA 1992: Por primera vez en dos décadas todos los países miembros del COI participan en una Olimpiada. Con la ruptura de la Unión Soviética y de Yugoslavia, varias naciones de Europa Oriental compiten por separado. La sensación fue el equipo de basquetbol de los Estados Unidos. El llamado ‘Dream Team’ contó por primera vez con jugadores de la NBA como Michael Jordan, Larry Bird, Charles Barkley y ‘Magic’ Johnson (portador del VIH). El equipo logró 117 puntos en promedio en 8 partidos y no solicitó ni una sola vez tiempo muerto. Ganó la medalla de oro al doblegar a Croacia. 
XXVI. ATLANTA 1996: Debieron realizarse en Atenas, conmemorando el centenario de las Olimpiadas modernas, pero el dinero de la Coca-Cola —marca oriunda de Atlanta— y otros sponsors pudo más. Los Juegos se vieron empañados por un atentado terrorista. El estallido de una bomba en los exteriores del Estadio Olímpico causó la muerte de dos personas y centenares de heridos. La mayor sorpresa la dio la selección de fútbol de Nigeria. Las ‘Águilas Verdes’ con Babayaro, Amokachi, Amunike y Nwankwo Kanu —la revelación del torneo—, derrotaron a Brasil 4-3- en semifinales y a Argentina 3-2- en la Final. 
XXVII. SÍDNEY 2000: Por primera vez Corea del Sur y Corea del Norte desfilaron en la ceremonia inaugural bajo una misma bandera, la cual era blanca con una línea azul. Afganistán no participó por hallarse suspendida desde la instauración del régimen Talibán. La figura fue el australiano Ian Thorpe de sólo 17 años, apodado ‘El Torpedo’, quien obtuvo tres medallas doradas en Natación. Obtendría dos preseas de oro más en Atenas y en 2006 se retiró del deporte, aduciendo “falta de estímulo para seguir compitiendo”.
 
XXVIII. ATENAS 2004: Uno de los países más pobres de la Unión Europea se dio el lujo de organizar los primeros Juegos del siglo XXI, dejando al erario helénico más endeudado de lo que estaba. La figura fue Michael Phelps, el ‘Tiburón de Baltimore’, un muchacho de 19 años influenciado por su progenitora a practicar la Natación para contrarrestar la hiperactividad que lo había convertido en un ‘chico problema’ en su etapa escolar. Cosechó ocho medallas, seis de oro y dos de bronce, convirtiéndose en el primer atleta en ganar ocho medallas en unos Juegos Olímpicos no boicoteados.
XXIX. BEIJING 2008: Fiesta deportiva empañada por las campañas de diversos activistas solicitando el boicot a causa de las flagrantes violaciones a los Derechos Humanos que se cometen en China (y que ninguna nación se atreve a denunciar). La figura volvió a ser Michael Phelps —aunque Usain Bolt con sus tres medallas y récords en velocidad estuvo bastante cerca— quien con ocho preseas doradas en Natación superó el récord de Mark Spitz. Con las medallas obtenidas en Londres y en Río de Janeiro, Phelps ha sumado 27 en total (22 de Oro, 3 de Plata y 2 de Bronce) logrando una cifra que lo convierte en el deportista más importante de la historia.
XXX. LONDRES 2012: Única ciudad que ha sido sede de los Juegos en tres oportunidades. Muchas delegaciones musulmanas permitieron por primera vez la participación de mujeres con lo que se logra una igualdad ideal en la participación de ambos sexos. La figura fue el jamaiquino Usain Bolt —pero Phelps estuvo bastante cerca— quien volvió a cosechar tres preseas doradas en las mismas pruebas de Beijing, ratificando que es el hombre más veloz de todos los tiempos.

Resta todavía una semana de Juegos en Río de Janeiro. Para precisar quien será su protagonista descollante, es necesario analizarlo con la lupa del tiempo.

1 comentarios:

Gonzalo Dìaz dijo...

Muy buena tus remembranzas de las olimpiadas ya efectuadas. Habrías hecho un trío de polendas con el Pocho Rospigliosi y el Veco.